Acuerdo preliminar entre EE.UU. y China abre paso a la cumbre Trump-Xi
EE.UU. y China alcanzaron un acuerdo preliminar en Kuala Lumpur que prepara la cumbre entre Trump y Xi. Las negociaciones abordaron aranceles, tierras raras, fentanilo y comercio bilateral, estableciendo un marco que interesa al sector empresarial global.
EYNG, 27/10/2025. En un giro diplomático que interesa de cerca a la comunidad empresarial global, las delegaciones de Estados Unidos y China anunciaron este domingo un acuerdo preliminar tras dos días de negociaciones en Kuala Lumpur, lo cual despeja el camino para el esperado encuentro entre el presidente Donald Trump y su contraparte china Xi Jinping. Las conversaciones se llevaron a cabo en la Torre Merdeka 188 de la capital malaya y, según la agencia oficial china Xinhua, ambas partes «exploraron propuestas adecuadas para abordar las preocupaciones mutuas».
Contexto y alcance del acuerdo
En Kuala Lumpur, la delegación china, encabezada por Li Chenggang —actual representante de Comercio Internacional de China— declaró que EE.UU. y China alcanzaron «un acuerdo preliminar» después de explorar temas clave como los controles a las exportaciones, la prolongación de la suspensión recíproca de aranceles y la cooperación antidrogas sobre el fentanilo.
Por su parte, el secretario del Tesoro estadounidense Scott Bessent afirmó que se han «construido unas bases muy sólidas» de cara a la reunión Trump-Xi, mencionando que los temas abarcaban comercio, tierras raras, fentanilo, TikTok y la relación general bilateral.
Principales líneas de negociación
Las conversaciones trataron múltiples frentes:
- Exportaciones de tierras raras, estratégico sector en el que China posee prácticamente el dominio global de producción y exportación.
- Aranceles y tarifas portuarias: EE.UU. mantuvo una «postura firme», mientras China defendió con determinación sus intereses, incluida la ampliación del comercio bilateral y el control de los buques de carga chinos.
- Cooperación antidrogas y el gravamen sobre productos vinculados al fentanilo, aspecto que aporta una dimensión de seguridad al diálogo comercial.
Implicaciones para los empresarios
Para el sector privado, este preludio de acuerdo puede desbloquear varios escenarios:
- Reducción del riesgo de una escalada arancelaria súbita: EE.UU. había amenazado con gravámenes de hasta el 100 % sobre productos chinos a partir del 1 de noviembre.
- Mayor claridad en materia de comercio de insumos estratégicos —como tierras raras— que afectan a industrias tecnológicas, automotrices y energéticas.
- Un entorno más estable para la inversión y la cadena de suministro global, en el corto plazo, aunque con cautela: aún se trata de un acuerdo «preliminar» que requiere aprobación de ambos gobiernos y que no garantiza transición inmediata a una fase más amplia.
Riesgos y puntos de vigilancia
- Que el acuerdo se quede en un «alto al fuego» diplomático sin resolver los desequilibrios estructurales en el comercio bilateral. Algunos analistas advierten que se trata de «retroceder el reloj» al escenario previo a los grandes aranceles de EE.UU.
- Que la falta de detalles concretos —China no ofreció aún cifras ni cronogramas— genere incertidumbre para los mercados y los empresarios.
- Que se condicione a la aprobación de los procedimientos internos de cada país, lo que introduce un grado de riesgo político adicional.
Perspectivas de seguimiento
El siguiente paso será la reunión entre Trump y Xi, aún por confirmar oficialmente por Pekín, que podría concretarse en Corea del Sur el próximo jueves. Esta cumbre tendrá carácter decisivo para avanzar de lo preliminar a lo concreto.
Empresarios y estrategas deben estar atentos no solo al acuerdo final, sino a los indicadores que lo anticipan: niveles de compra china de productos estadounidenses, movimientos sobre tecnologías críticas, y la gestión de tierras raras.



