
EYNG, 05/06/2025. En un mundo cada vez más digitalizado, la seguridad financiera se ha convertido en un asunto prioritario tanto para personas como para empresas. Uno de los delitos más comunes y perjudiciales en el ecosistema financiero actual es la clonación de tarjetas bancarias, una práctica delictiva que puede poner en riesgo los recursos de una compañía o los ahorros personales de cualquier directivo o colaborador.
Según datos proporcionados por la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (DIVINDAT) de la Policía Nacional del Perú, solo en la ciudad de Lima se registran entre 25 y 30 denuncias mensuales por clonación de tarjetas. A nivel nacional, durante el 2024 se notificaron más de 42,000 casos de delitos informáticos, lo que representa un alarmante incremento del 40% respecto al año anterior. La modalidad más frecuente es precisamente la clonación de tarjetas, seguida de fraudes por internet y suplantación de identidad.
¿Cómo operan los delincuentes?
El uso de dispositivos ilegales como skimmers o lectores clandestinos, así como microcámaras ocultas, permite a los delincuentes capturar los datos de tarjetas sin que las víctimas lo perciban. Esta información robada es posteriormente usada para realizar compras en línea, transferencias o retiros de dinero no autorizados. Esta técnica, conocida como carding, suele pasar desapercibida hasta que ya es demasiado tarde.
A medida que los pagos digitales y el uso de terminales POS se popularizan, también lo hacen las modalidades de estafa asociadas a ellos. Por ello, es crucial conocer las mejores prácticas para mitigar el riesgo.
Seis recomendaciones clave para evitar la clonación de tarjetas
Roberto Percca, gerente de Desarrollo del Emprendedor y especialista del Consultorio Financiero de Mibanco, comparte seis consejos fundamentales para prevenir este tipo de fraudes, tanto en la vida personal como en la gestión empresarial:
1. Mantén tu tarjeta siempre a la vista
Cuando realices pagos en restaurantes, tiendas o cualquier establecimiento, asegúrate de que la tarjeta no salga de tu campo visual. Dejarla fuera de tu alcance facilita su manipulación con dispositivos que pueden copiar su información en segundos.
2. Protege tu clave con discreción
Al digitar tu PIN en cajeros o POS, cúbrelo con la otra mano o con un objeto. Esta simple acción puede bloquear la visión de cámaras ocultas que buscan registrar tu contraseña.
3. No compartas tus datos bancarios
Ninguna institución financiera legítima solicita información confidencial como el número de tarjeta, claves o códigos de seguridad por teléfono, correo o mensaje. Si recibes una solicitud así, desconfía y repórtala de inmediato.
4. Revisa los cajeros antes de usarlos
Antes de insertar tu tarjeta, inspecciona visualmente el cajero automático. Si detectas piezas sueltas, ranuras alteradas o elementos sospechosos, evita operar en él y notifícalo a la entidad correspondiente.
5. Activa notificaciones de movimientos
Configura alertas de tu app bancaria para recibir notificaciones en tiempo real sobre cualquier transacción. Esto permite detectar rápidamente cualquier actividad no autorizada.
6. Desactiva el uso internacional si no lo necesitas
Si no estás realizando operaciones fuera del país, mantener deshabilitada la opción de uso internacional reduce considerablemente la posibilidad de que tus datos sean utilizados en el extranjero.
Un enfoque empresarial: la prevención como estrategia financiera
Para los empresarios, este tipo de fraudes puede representar no solo pérdidas económicas personales, sino también vulnerabilidades en sus compañías. Capacitar al personal sobre buenas prácticas de seguridad bancaria, implementar sistemas de monitoreo de transacciones y establecer protocolos de seguridad financiera son acciones imprescindibles para blindar el negocio.
El control financiero y la educación digital deben ir de la mano en una estrategia corporativa que minimice riesgos y garantice la integridad de los activos de la empresa. La seguridad cibernética financiera ya no es solo un tema técnico; es un componente clave de la gestión empresarial moderna.