La ciberseguridad ya no es opcional: el reto urgente de las empresas
La prevención y la inversión en seguridad digital ya no son opcionales; son una necesidad urgente para cualquier entidad que busque mantenerse a salvo en el ecosistema digital actual.

La digitalización avanza a pasos agigantados, para 2029 se estima que más del 90% de la población mundial estará conectada. Sin embargo, este crecimiento exponencial también amplifica las oportunidades para los ciberdelincuentes, lo que me lleva a reafirmar que la ciberseguridad es un pilar esencial para la protección de datos personales y empresariales. No se trata solo de evitar pérdidas económicas millonarias, sino de garantizar la continuidad operativa y la confianza en el entorno digital.
Uno de los datos más alarmantes que he observado en el panorama actual es que un ataque cibernético puede pasar desapercibido durante un promedio de 206 días antes de ser detectado. Esto significa que las empresas pueden estar comprometidas por meses sin siquiera saberlo, permitiendo que los atacantes extraigan información valiosa o paralicen sus sistemas cuando más les convenga. La pregunta que siempre me hago no es si una organización será atacada, sino cuándo y qué tan preparada está para responder.
Los costos de los ciberataques son exorbitantes. A nivel global, las empresas pueden gastar en promedio 5.9 millones de dólares para recuperarse de un incidente de seguridad, mientras que en Latinoamérica esta cifra alcanza los 3.9 millones.
Inteligencia artificial: Una aliada estratégica
En ese contexto, la inteligencia artificial ha emergido como un aliado clave en la lucha contra las amenazas digitales. Gracias a la IA, ahora es posible detectar ataques en tiempo real y responder de manera automatizada, reduciendo significativamente los tiempos de reacción y el impacto de las brechas de seguridad. Durante el evento CiberTrends: La IA como escudo digital, junto a otros expertos del sector, destacamos la importancia de adoptar tecnologías que permitan gestionar dispositivos y datos de forma remota y segura, sin depender de redes locales que puedan ser vulnerables.
«El desafío de la ciberseguridad no es solo tecnológico, sino también estratégico. Las empresas que subestimen este aspecto no solo ponen en riesgo su operatividad, sino que pueden comprometer la confianza de sus clientes y socios comerciales».
Desde mi experiencia en TIVIT Latam, siempre enfatizo que las empresas deben pasar de un enfoque reactivo a uno proactivo en materia de seguridad digital. Esto implica no solo implementar herramientas tecnológicas de última generación, sino también fomentar una cultura organizacional de concienciación y capacitación en ciberseguridad. Francisco González, especialista en seguridad de Microsoft, también resaltó en el evento que el uso de plataformas integradas optimiza la gestión de alertas, lo que facilita una respuesta más efectiva ante posibles amenazas.
La ciberseguridad empresarial como inversión estratégica
El desafío de la ciberseguridad no es solo tecnológico, sino también estratégico. Las empresas que subestimen este aspecto no solo ponen en riesgo su operatividad, sino que pueden comprometer la confianza de sus clientes y socios comerciales. La prevención y la inversión en seguridad digital ya no son opcionales; son una necesidad urgente para cualquier entidad que busque mantenerse a salvo en el ecosistema digital actual.
Finalmente, la ciberseguridad no es un gasto, sino una inversión en la sostenibilidad y resiliencia de los negocios. En un mundo hiperconectado, proteger la información no es solo un deber corporativo, sino un imperativo para la estabilidad del entorno digital en el que operamos.