Millones en movimiento: La revolución silenciosa del deporte femenino

EYNG, 09/04/2025. El deporte femenino de élite está atravesando un momento decisivo. Según el informe de Deloitte «Más allá de la barrera de los mil millones de dólares: Planificando la siguiente fase de crecimiento», se estima que los ingresos globales del sector superarán los 2.300 millones de dólares en 2025, lo que evidencia una evolución estructural y no meramente coyuntural. Este fenómeno ya no gira en torno a la validación del modelo de negocio, sino al diseño de estrategias para consolidar un crecimiento sostenible.
Un giro estratégico: de ROI a capital de impacto
El informe de Deloitte destaca que las empresas y marcas que apuesten por el deporte femenino deben adoptar una visión a largo plazo, propia del capital de riesgo, en lugar de perseguir retornos inmediatos. En ese sentido, resalta que la clave está en ver al deporte femenino como un ecosistema con gran potencial social, económico y cultural, que requiere infraestructura, compromiso institucional y planes de inversión sostenibles.
Pete Giorgio, líder global de la práctica de Deportes de Deloitte, afirma que «ya no se trata de probar el valor del deporte femenino, sino de construir hacia el futuro». El reto, señala, es transformar el impulso actual en un modelo sólido de desarrollo a largo plazo, con infraestructura adecuada y oportunidades comerciales claras.
Deporte femenino: Un 2024 histórico y un 2025 aún más prometedor
El año 2024 marcó un hito con más de US$ 1.000 millones en ingresos comerciales provenientes de patrocinios, ventas de merchandising, acuerdos de imagen y giras internacionales. Para 2025, Deloitte proyecta que los ingresos totales superarán los US$2.300 millones, con una distribución destacada:
- US$ 1.260 millones (54%) en ingresos comerciales.
- US$ 590 millones (25%) por derechos de transmisión.
- US$ 500 millones (21%) por jornadas de partido.
Según el informe, la participación de las marcas en el ecosistema femenino está aumentando gracias a la mayor visibilidad, el reconocimiento de figuras clave y la profesionalización del deporte.
Baloncesto femenino lidera el crecimiento global
En cuanto a disciplinas, el baloncesto femenino se posiciona como el motor principal del crecimiento. Se estima que generará US$ 1.030 millones en 2025, superando al fútbol femenino, que alcanzará los US$ 820 millones. Esta diferencia refleja la capacidad del baloncesto para atraer nuevas audiencias, impulsar la asistencia a los estadios y multiplicar las ventas de productos oficiales.
Al respecto, el estudio de Deloitte destaca que la creación de ligas más competitivas, el surgimiento de nuevas estrellas y la inversión en recintos deportivos están posicionando al baloncesto como el deporte femenino con mayor proyección económica.
Nuevos modelos de negocio y alianzas estratégicas
Deloitte destaca que las organizaciones están optando por estructuras independientes para los equipos femeninos, lo que permite atraer financiamiento exclusivo, alianzas de largo plazo y una gestión enfocada. A ello se suma la entrada de marcas no endémicas, como Unilever, Elf Beauty y Skyscanner, que ven en el deporte femenino una oportunidad para conectar con audiencias diversas y modernas.
Además, resalta el Compromiso de Athena, una iniciativa respaldada por múltiples empresas líderes, que está impulsando una mayor inversión corporativa en ligas y torneos femeninos. Este compromiso marca un cambio de paradigma: se valora tanto el retorno financiero como el impacto reputacional y social de apoyar al deporte femenino.
Recomendaciones para capitalizar el boom del deporte femenino
Deloitte sugiere varias líneas de acción para que las marcas y organizaciones deportivas continúen fortaleciendo este crecimiento:
- Inversión en infraestructura dedicada, como estadios exclusivos y centros de alto rendimiento para mujeres.
- Potenciación de eventos insignia, transformándolos en experiencias inmersivas que conecten cultura, deporte y comunidad.
- Estrategias de contenido adaptadas al consumidor digital, incluyendo transmisiones múltiples en plataformas como YouTube y contenido detrás de cámaras.
- Diversificación de alianzas con marcas de moda, tecnología, turismo y estilo de vida, para ampliar la base de fans.
- Construcción de narrativas de impacto, reforzando el papel del deporte como agente de cambio social.
Una industria en transformación
El análisis de Deloitte pone énfasis en que el crecimiento no puede depender únicamente de indicadores inmediatos. La sostenibilidad del deporte femenino exige visión estratégica, acciones audaces y estructuras sólidas que soporten el crecimiento a largo plazo.
El interés de los inversores, patrocinadores y medios es cada vez mayor, y los países que albergan grandes competencias femeninas se están posicionando como plataformas de atracción para turismo deportivo, inversión internacional y promoción de marca país.
Como puede verse, el deporte femenino ha dejado de ser una promesa para convertirse en un fenómeno económico con impacto global. Para los empresarios, inversores y marcas, el mensaje es claro: es momento de estar presentes, innovar y liderar esta revolución deportiva con enfoque estratégico.