Lagarde alerta sobre impacto de aranceles en la economía europea
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, advierte que los aranceles de EE.UU. podrían reducir el crecimiento en la eurozona y aumentar la inflación. La incertidumbre política y económica pone a prueba la estabilidad financiera del bloque.

EYNG, 20/03/2025. La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha lanzado una seria advertencia: la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos a las importaciones europeas y las represalias de la Unión Europea (UE) podrían generar un impacto negativo en el crecimiento y la inflación en la zona euro.
Según las estimaciones del BCE, un arancel del 25 % aplicado por EE.UU. a las importaciones desde Europa reduciría el crecimiento del área del euro en 0,3 puntos porcentuales en el primer año. Si la UE responde con aranceles equivalentes, la caída del crecimiento podría alcanzar medio punto porcentual, afectando significativamente la estabilidad económica del bloque.
Un impacto inmediato en el crecimiento de la economía europea
Durante su intervención ante la Comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo, Lagarde explicó que el mayor impacto en el crecimiento económico se concentraría en el primer año, aunque el efecto negativo en la producción podría persistir en el tiempo.
En términos inflacionarios, el BCE calcula que un aumento de aranceles y un euro más débil debido a la menor demanda de productos europeos en EE.UU. podrían elevar la inflación en aproximadamente 0,5 puntos porcentuales a corto plazo. Sin embargo, en el mediano plazo, el debilitamiento de la actividad económica podría moderar las presiones inflacionarias.
La incertidumbre sigue siendo un factor clave. Lagarde enfatizó que el BCE se mantiene vigilante y listo para actuar en caso de que la estabilidad de precios se vea comprometida por estos factores externos. «El alto nivel de incertidumbre política requiere que sigamos atentos y preparados para responder», afirmó.
Política monetaria: Incertidumbre en los tipos de interés
Uno de los puntos clave abordados por Lagarde fue la política monetaria del BCE en este contexto de incertidumbre. A pesar de los seis recortes consecutivos de tipos de interés desde junio pasado, el banco central no puede comprometerse con una senda fija de tipos, especialmente considerando las condiciones actuales.
El BCE ha llevado la tasa de referencia al 2,5 % y podría hacer una pausa en las reducciones en su próxima reunión de abril, dependiendo de cómo evolucionen los datos económicos. El proceso de desinflación está avanzando, pero el BCE seguirá tomando decisiones en función de la información disponible.
¿Habrá un acuerdo entre EE.UU. y la UE?
A pesar de la amenaza de los aranceles, Lagarde se mostró optimista sobre la posibilidad de que EE.UU. y la UE lleguen a un acuerdo para mitigar el impacto de estas medidas. Según la presidenta del BCE, la mejor estrategia para Europa no es la confrontación, sino una mayor integración comercial, tanto dentro del bloque como con otros socios internacionales.
El BCE ha analizado diversos escenarios y concluye que una mayor apertura comercial podría compensar las pérdidas causadas por los aranceles unilaterales. En este sentido, Lagarde instó a los eurodiputados a fortalecer la posición de la UE eliminando barreras internas y promoviendo relaciones más sólidas con el resto del mundo.
Además, resaltó la necesidad de acelerar la implementación de un euro digital para reducir la dependencia de Europa de proveedores de pagos extranjeros, especialmente en un contexto donde EE.UU., bajo la administración de Donald Trump, ha mostrado un fuerte apoyo a las criptodivisas y monedas estables.
Inversiones en defensa y estabilidad financiera
Otro tema relevante abordado en la sesión parlamentaria fue el impacto de las inversiones en defensa dentro de la UE. En particular, se discutió el ambicioso plan de Alemania, que destinará 500.000 millones de euros a infraestructuras.
Lagarde explicó que los mercados están reaccionando a la expectativa de un aumento del endeudamiento a largo plazo, reflejado en la subida de la rentabilidad de los bonos a diez años. Sin embargo, aseguró que las primas de riesgo no se han ampliado significativamente.
Si bien estas inversiones podrían generar un ligero aumento en la inflación, Lagarde aclaró que el BCE no prevé un impacto significativo en la estabilidad económica de la eurozona.
Un futuro incierto para la economía europea
Como puede verse, el panorama de la economía europea enfrenta múltiples desafíos, desde los riesgos asociados a la política arancelaria de EE.UU. hasta la incertidumbre sobre la evolución de la inflación y los tipos de interés.
El BCE se encuentra en una posición clave para gestionar estos riesgos, con un enfoque flexible y basado en datos. Mientras tanto, las empresas y los inversionistas deberán prepararse para un entorno marcado por la volatilidad y la incertidumbre, adaptando sus estrategias a los cambios en la política comercial global.