¿Cómo mejorar la productividad con un balance trabajo-vida?
Descubre tres estrategias efectivas para equilibrar la vida profesional y personal sin sacrificar la productividad. Aprende a gestionar tu tiempo, delegar y establecer límites.
EYNG, 14/03/2025. En un mundo empresarial cada vez más demandante, lograr un equilibrio entre la vida profesional y personal se ha convertido en un desafío constante. Según estudios recientes, más del 60% de los líderes y profesionales experimentan agotamiento debido a la presión de compaginar ambas facetas. De estos, el 80% señala que el estrés afecta directamente su productividad y creatividad, lo que impacta no solo en su desempeño, sino también en la cultura organizacional de sus empresas.
Ante este escenario, Ana María Pajuelo, consultora asociada de LHH DBM Perú, comparte tres estrategias clave para lograr un balance efectivo sin comprometer el crecimiento profesional ni la calidad de vida. Para la especialista, alcanzar este equilibrio no es solo una necesidad, sino una estrategia inteligente que todo empresario y líder debe implementar de manera consciente.
1. Gestionar el tiempo como un recurso estratégico
El tiempo es un recurso no renovable y, como tal, debe ser administrado con la misma rigurosidad que cualquier otro activo empresarial. «Si no gestionas tu tiempo, alguien más lo hará por ti», enfatiza Pajuelo.
Para lograrlo, recomienda planificar y calendarizar actividades personales con la misma prioridad que las laborales. Agendar reuniones, pero también programar pausas, ejercicio y momentos de calidad con la familia, contribuye a una rutina equilibrada. Un método eficaz es formar parte de comunidades con intereses compartidos, como hobbies o deportes, lo que permite desconectarse del trabajo de manera saludable.
2. Delegar tareas y empoderar al equipo
Uno de los errores más comunes entre empresarios y altos ejecutivos es creer que deben encargarse de todo. «No somos superhéroes, y delegar es un acto de liderazgo», destaca la consultora.
Sobrecargarse de responsabilidades no solo incrementa el agotamiento, sino que limita el desarrollo del equipo. La delegación efectiva no significa solo distribuir tareas, sino empoderar a los colaboradores, permitiéndoles asumir mayores responsabilidades y desarrollar sus talentos. Un equipo autónomo y motivado es clave para la sostenibilidad del negocio.
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Establecer límites y aprender a decir “no”
Definir límites claros es fundamental para evitar el agotamiento. «Decir ‘no’ no es una señal de debilidad, sino una forma inteligente de priorizar lo verdaderamente importante», subraya Pajuelo.
Muchas veces, los profesionales sienten la obligación de estar presentes en todas las reuniones o asumir todas las responsabilidades, lo que resulta en una carga excesiva. Aprender a rechazar tareas que no aportan valor y enfocarse en las actividades estratégicas puede liberar hasta 12 horas semanales, optimizando el rendimiento y reduciendo el estrés.
Liderazgo con propósito: el equilibrio como inspiración
Pajuelo enfatiza que el liderazgo no solo implica dirigir equipos, sino también gestionar la propia energía y tiempo de manera eficiente. Un líder que no cuida su equilibrio personal difícilmente podrá inspirar a su equipo.
«El liderazgo es un reflejo de lo que somos. Si nos mostramos agotados y sobrepasados, nuestro equipo también lo notará. En cambio, si proyectamos equilibrio y bienestar, inspiraremos una cultura empresarial más productiva y humana», concluye.
En un mundo empresarial hiperconectado, lograr un equilibrio entre la vida personal y profesional no es un lujo, sino una estrategia clave para el éxito a largo plazo. Implementar estas tres estrategias permitirá a los líderes no solo mejorar su bienestar, sino también fortalecer sus organizaciones.
