FMI: Aranceles de represalia a Asia ponen en riesgo el crecimiento global
El FMI advierte sobre el impacto de los aranceles de represalia en Asia, que amenazan el crecimiento económico, alteran las cadenas de suministro y generan incertidumbre global.
EYNG, 19/11/2024. El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió recientemente que los aranceles de represalia aplicados a productos asiáticos podrían tener consecuencias graves para las economías de la región, afectando el crecimiento económico, elevando costos y complicando las cadenas de suministro. A pesar de que Asia sigue siendo vista como un motor clave del crecimiento económico global, esta amenaza podría obstaculizar su desarrollo y generar una mayor inestabilidad económica.
Durante un foro sobre riesgos sistémicos realizado en Cebú, el director del FMI para Asia y el Pacífico, Krishna Srinivasan, expresó su preocupación acerca de los efectos negativos que podrían surgir de los aranceles de represalia. «Estos aranceles podrían perjudicar las perspectivas de crecimiento en toda la región, alargando las cadenas de suministro y reduciendo su eficiencia», señaló Srinivasan, quien enfatizó que esta situación podría tener un impacto profundo en el desarrollo de Asia.
Impacto de las políticas proteccionistas de EE.UU.
La advertencia del FMI se produce en un contexto de incertidumbre política, marcado por los planes del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer un arancel del 60% sobre productos importados desde China y gravar con un impuesto del 10% a todas las demás importaciones. De llevarse a cabo, estas políticas proteccionistas podrían afectar significativamente el comercio mundial, frenando el crecimiento de los principales países exportadores y generando presiones inflacionarias en Estados Unidos. Esta situación podría obligar a la Reserva Federal a ajustar su política monetaria, complicando aún más el panorama global, en un contexto de crecimiento económico frágil.
Europa y la escalada de aranceles a China
En un giro reciente, la Unión Europea también ha decidido incrementar los aranceles a los vehículos eléctricos fabricados en China, elevándolos hasta un 45,3%. Esto no solo ha generado tensiones comerciales con Pekín, sino que también podría desencadenar represalias que afecten aún más a las cadenas de suministro globales, según los analistas.
El FMI, en su última Perspectiva de la Economía Mundial, estima que el crecimiento económico mundial se mantendrá en 3,2% para 2024 y 2025. Sin embargo, Asia sigue siendo una excepción con un crecimiento proyectado del 4,6% para 2024 y del 4,4% para 2025, lo que pone de manifiesto su potencial como motor económico global. A pesar de estas proyecciones positivas, Srinivasan advirtió que la región enfrenta una etapa de transición marcada por incertidumbres, incluyendo «el riesgo agudo» de una escalada de tensiones comerciales entre socios estratégicos.
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El impacto de estas tensiones comerciales se extiende más allá de la región asiática. La incertidumbre respecto a la política monetaria en economías avanzadas podría influir significativamente en las decisiones de política monetaria en Asia, con efectos sobre los flujos de capital, los tipos de cambio y los mercados financieros. Empresas como Tesla, por ejemplo, han experimentado un aumento del 30% en sus acciones desde las elecciones del 5 de noviembre, lo que subraya el impacto que estas tensiones comerciales pueden tener en mercados clave y sectores de alta tecnología.
La economía global y el papel de Asia como motor de crecimiento están en juego en este delicado equilibrio de tensiones comerciales, decisiones políticas y factores macroeconómicos que determinarán el curso del desarrollo económico en los próximos años.
